La Observación
¿Qué es la observación?
La
observación es la técnica más
básica dentro del proceso de investigación, que consiste en el establecimiento
de una relación entre el objeto que se intenta abordar y el sujeto que lo
investigará.
Para llevar adelante la
observación se utilizan los cinco
sentidos y es a partir de ellos que se realiza el primer contacto
con el fenómeno a investigar. De todas formas, el investigador va orientando el
uso de sus sentidos, para poder analizar aquellos aspectos que más le
interesen.
La observación se traduce en un registro visual
de lo que ocurre en el mundo real, en la evidencia empírica. Así toda
observación; al igual que otros métodos o instrumentos para consignar
información; requiere del sujeto que investiga la definición de los objetivos
que persigue su investigación, determinar su unidad de observación, las
condiciones en que asumirá la observación y las conductas que deberá registrar.
Cuando decide emplearse como instrumento para
recopilar datos hay que tomar en cuenta algunas consideraciones de rigor. En
primer lugar como método para recoger la información debe planificarse a fin de
reunir los requisitos de validez y confiabilidad. Un segundo aspecto está
referido a su condición hábil, sistemática y poseedora de destreza en el
registro de datos, diferenciado los talantes significativos de la situación y
los que no tienen importancia.
Así también se requiere habilidad para
establecer las condiciones de manera tal que los hechos observables se realicen
en la forma más natural posible y sin influencia del investigador u otros
factores de intervención.
¿Por qué es importante en la investigación?
La ciencia
comienza con la observación y finalmente tiene que volver a ella para encontrar
su convalidación final, la observación en las ciencias sociales posee los
mismos caracteres y significado que en las demás ciencias, en cualquier sector
de la investigación científica cabe a la observación descubrir y poner en
evidencia las condiciones de producción de los fenómenos estudiados.
La
observación la utilizamos cotidianamente para adquirir conocimientos, porque
permanentemente observamos, pero rara vez lo hacemos científicamente. Algunos
autores llegan a entenderla como expresión de la capacidad del
sujeto-investigador de “ver” las cosas, pero lo importante no es lo que se “ve”
sino lo que se observa con método, con una preparación adecuada.
En las
ciencias sociales el proceso de observación puede abarcar tres operaciones
intelectuales distintas:
b) Las operaciones
que permiten identificar y seleccionar los hechos que poseen alguna
significación.
c) Las
operaciones mediante las cuales se determinan, aíslan y deducen las instancias
empíricas relevantes para la reconstrucción y explicación de los fenómenos, en
las condiciones en que fueron consideradas.
La ayuda de
estas tres operaciones nos permiten tomar en consideración que algunas
investigaciones tienen un merecido y adecuado tratamiento, en tanto que otras
guardan una renovación constructiva de la comprensión de las cuestiones
metodológicas en las ciencias sociales, esto es, por regla en la mayoría de las
investigaciones de carácter cualitativo, los errores sólo se evidencian en los
períodos finales de la reconstrucción analítica y la tendencia dominante entre
los investigadores de las ciencias sociales consiste en atribuir a la primera
fase de la observación a aquellas en que los datos se tienen en bruto, una
menor influencia de errores. En tanto que la probabilidad de errores aumenta en
las dos últimas fases debido a la manipulación de las mismas.
La
observación es un instrumento primordial de la investigación científica y se
recomiendan estas condiciones para que la observación se convierta en técnica
científica:
a) Que sirva
a un objeto formulado de investigación.
b) Que sea
planificada sistemáticamente.
c) Que sea
controlada y relacionada con proposiciones más generales en lugar de
presentársele como una serie de curiosidades.
d) Que quede
sujeta a comprobaciones y controles de validez y fiabilidad.
¿Cuáles
son los tipos de observación?
Dentro
del ámbito de la investigación se
identifican diferentes tipos de observación. Algunos de ellos son los
siguientes:
·
Científica: en este caso, en cambio, el individuo entra en
contacto con el fenómeno con una preparación
previa, que le sirve como guía para saber a qué se le debe prestar
atención, en qué enfocarse y con qué puede encontrarse. De esta manera, la
persona sabrá qué irá a observar aunque puede ocurrir que una vez que se encuentre
frente al fenómeno entre en contacto con elementos que no se esperaba, y se
concentre en ellos.
·
No
científica: esta observación es la que se realiza de
manera espontánea, sin la intención de llevar
adelante un proceso de investigación, por lo que no se hace de manera
rigurosa ni sin ninguna preparación para ello. Esta observación es la que hace
una persona cada vez que entra en contacto con algún fenómeno conocido o no. Se
trata de un acto sin intención pero esto no significa que a partir de esta
observación la persona no pueda decidir iniciar una investigación a futuro.
· De laboratorio: en observaciones como estas se delimita
el grupo de personas o a
la porción de un fenómeno que
se quiere estudiar para luego observarlo, por considerarlo representativo, o bien, cuando
directamente se traslada una muestra de
lo que se quiera observar a un laboratorio para estudiarlo allí. La ventaja que
ofrece la observación de laboratorio es que el investigador puede manipular las variables y en
base a ello observar los cambios acontecidos y sacar conclusiones. Aunque se
debe tener en cuenta que en la vida real las cosas no suceden como en un
laboratorio, por lo que los resultados obtenidos nunca serán idénticos a lo que
sucede en la realidad.
·
De
campo: en ésta, el estudioso no traslada al objeto de estudio a su
laboratorio, sino que es él el que se dirige al lugar
en el que se desarrolla el fenómeno en cuestión. Por supuesto que
en estos casos, lo observado será mucho más auténtico y se podrán sacar conclusiones
mucho más acertadas, pero se debe tener en cuenta que no todos los fenómenos
ofrecen esta posibilidad y que muchas veces la presencia del observador puede
condicionar el desenvolvimiento de los hechos.
Individual: la observación individual es la que hace una sola persona, sea porque es parte de una investigación igualmente individual, o porque dentro de un grupo se le ha encargado de una parte de la observación para que la realice sola.
Grupal: una observación conocida bajo este nombre se lleva adelante por un grupo de personas. Puede ocurrir que el grupo acuerde que cada miembro observe una determinada parte o fragmento del fenómeno en cuestión para luego ponerlo en común y conectarlo con lo que otros observaron. En otros casos, cada miembro se dedica a observar a un grupo o fenómeno en su totalidad y luego cada uno comparte su propia experiencia para establecer comparaciones y sacar conclusiones entre todos.
Participante: como su nombre indica, y en oposición a la observación antes mencionada, en esta el investigador sí se involucra en el fenómeno a investigar, y forma parte de este. Esto hace que pueda tener un contacto mucho más directo con el objeto de estudio, pero a veces, puede ocurrir que aquello que se le presente no resulte auténtico justamente por la presencia de un tercero que lo condicione. Es por ello que en estos casos, lo observado no será el todo fiel. Pero, por ejemplo, si se quiere conocer cómo es el comportamiento de un grupo de personas, este se puede comprender mucho mejor cuando se lo vive en primera persona.
- No participante: en este caso, el investigador no forma parte del fenómeno o grupo de personas que se quiera estudiar, sino que lo observa desde afuera, para no modificar ninguna de sus variables ni condicionar el comportamiento del objeto de estudio.
Directa: en esta observación es el propio investigador el que entra en contacto con el fenómeno a investigar. Por supuesto que esta observación es mucho más provechosa para el investigador, ya que siempre lo que una persona ve con sus propios ojos será mucho más completo que lo que le cuenten tercero y además puede orientar su observación a lo que él deseé no a lo que otra persona hizo.
Indirecta: cuando un investigador realiza una
observación de manera indirecta, esto significa que no entró en contacto directo con el
objeto o fenómeno a estudiar, sino que se basa en la observación
que hizo otro u otros especialistas. Es por esto que en la observación
indirecta se pueden establecer comparaciones o relaciones entre fenómenos que
el científico no pudo conocer directamente. Esto es ideal cuando se desean
investigar fenómenos del pasado o que se encuentran a distancias
significativas, ambos impedimentos para el científico, pero no por eso obstáculos
definitivos para poder llevar adelante un estudio con seriedad. Lo útil que
tiene la observación hecha por terceros es que puede aportar datos o detalles
que quizás al investigador no se le hubiesen ocurrido o se le habrían pasado
por alto.
Estructurada: esta clase de observación se aboca a lo cuantitativo y es la realizada a la hora de observar un problema que ha sido definido con claridad. Esta observación permite realizar un estudio preciso de los patrones que quieren medirse y observarse. La observación estructurada es la idónea a la hora de realizar investigaciones del tipo concluyente porque impone límites al investigador para incrementar tanto la objetividad como la precisión para obtener la información requerida.
No estructurada: este tipo de observación se la considera una técnica cualitativa, que no recurre a la determinación de categorías predeterminadas para registrar los acontecimientos a observar, como la estructurada. De todas maneras, una vez realizada la observación se suelen formular categorías para lograr una interpretación de los datos.
¿Cuáles son las pautas para construir una guía de
observación?
La guía de
observación es un instrumento de registro que evalúa desempeños y en ella se
establecen categorías con rangos más amplios que en la lista de cotejo. Permite
al docente mirar las actividades
desarrolladas por el estudiante de manera más integral. Para ello, es necesario presenciar el evento o actividad y registrar
los detalles observados.
Para elaborar una guía de observación se deben cumplir los siguientes pasos:
·
Título del tema que se va a recibir.
·
Aspectos y contenidos que se van a tratar.
·
Objetivos
que se persigue con el material didáctico.
·
Asunto con el que se debe centrar la atención.
·
Elaborar un
cuestionario con anticipación para enriquecer el debate de la clase.
·
Objetivos que se persigue con el material
didáctico.
·
Asunto en el que se debe centrar la atención de los
estudiantes.
Otras consideraciones que apoyan las tareas del docente y los facilitadores encargados de dirigir la docencia.
Otras consideraciones que apoyan las tareas del docente y los facilitadores encargados de dirigir la docencia.
·
Conocer y caracterizar los estudiantes
individualmente.
·
Trazar planes individuales según las características
de los educandos.
·
Apoyarlos en los aspectos académicos generales.
·
Orientarlos en el estudio independiente.
·
Valorar la
asistencia a la actividades presénciales.
·
Estar al tanto de sus problemas personales.
·
Motivarlo en relación con su carrera.
·
Participar activamente en los análisis del proceso
docente que se realicen con los educandos.
Bien José por la información incorporada en el blog sobre la observación. Esta bastante completa, lo que siempre es importante tener en cuenta que todo proceso de investigación arranca con una observación de una situación problema, fenómeno de estudio o caso; de allí que esta técnica es como la fase inicial y preliminar de acercamiento y estudio de un problema.
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